domingo, 9 de octubre de 2011

Las horas de las confesiones

Siempre, en algún momento del día, toda persona tiene su momento de sinceridad plena, en el cual se dice solamente la verdad.

Es peligroso, no se sabe que se puede llegar a confesar en esos momentos, pero, cuando se confiesa algo que era un secreto tan intimo y personal como el deseo en si, solamente te sentís libre, que podes contra todos. Y mucho mas si el deseo es mutuo.

Como explicarlo, como expresarlo, eso es difícil, por esa misma razón es tan peligroso. El peligro en si es lo que hace que esto sea tan interesante, las horas de confesiones son excelentes disparadores de adrenalina, excelentes para confirmar dudas, y perfectas para admitir millones de cosas...

5 comentarios:

  1. Perdón, pregunta: ¿Y si esos momentos no son excepcionales...? Si uno decide hacer de la verdad su vida, su razón de ser ¿el sentido de libertad y plenitud no sería más completo, gratificante y permanente...?!!!!!!

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  2. Definitivamente, pero entonces la adrenalina no seria tan excitante...

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  3. Como siempre un placer leer tus producciones.

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  4. Muchisimas gracias amalia, sabe que es un placer tener a alguien como vos para alentarme...

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  5. ¡Qué maravilloso talento tenés de escribir con tanto sentimiento!! ¡Felicitaciones Flor!!!! No dejes de compartirlo.

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